Por Richard Gray
La dispersión del Homo sapiens desde el continente africano al resto del mundo ha sido un enigma que ha desconcertado a los científicos durante décadas. ¿Cuál fue el punto de partida clave? ¿Y qué camino tomaron nuestros primeros ancestros para abrirse paso hacia Europa y Asia?
Un estudio genético realizado por la Universidad de Cambridge, en el Reino Unido, y publicado en el American Journal of Human Genetics, ha revelado el papel crucial de Egipto como puerta de entrada decisiva para la gran migración humana hace aproximadamente 55.000 años. Estos hallazgos no solo reconfiguran nuestra comprensión de la historia evolutiva de la humanidad, sino que también resaltan la profunda conexión genética que une a las poblaciones europeas y asiáticas contemporáneas con sus antiguos ancestros egipcios, confirmando que "el egipcio que llevamos dentro" es una parte integral del tejido genético global.
Un camino norteño, la ruta principal
La nueva investigación genética indica que los primeros humanos modernos emigraron y llegaron a Europa y Asia desde el norte de Egipto hace unos 55.000 años. El estudio responde así a una pregunta largamente esperada sobre la ruta que siguió el Homo sapiens primitivo al dispersarse desde el continente africano.
Los resultados muestran que la mayoría de los europeos y asiáticos que viven hoy están genéticamente más estrechamente relacionados con las poblaciones que viven en Egipto que con las de Etiopía. Esto sugiere que Egipto fue la última parada para las poblaciones que migraron de África hace 55.000 años, en lugar de tomar una ruta más al sur a través de Etiopía, como algunos científicos habían postulado, creyendo que los humanos podrían haber viajado de Etiopía a través del estrecho de Bab el Mandeb hasta la Península Arábiga.
Sin embargo, la nueva investigación indica que la ruta del norte desde Egipto, a través de la península del Sinaí y luego hacia Asia y Europa, fue el camino más probable. Estos hallazgos también respaldan la evidencia que sugiere que estos primeros humanos que salieron de África tuvieron contacto con los neandertales en el Levante en ese momento.
Desvelando un eslabón perdido en la historia humana
El Dr. Thomas Kivisild, antropólogo de la Universidad de Cambridge y uno de los líderes del estudio, afirmó: "Si bien nuestros resultados no abordan las controversias sobre el momento y las posibles complejidades de la dispersión humana desde África, sí pintan un cuadro claro de que la migración principal desde África siguió una ruta norteña y no sureña".
Su colega, el Dr. Luca Pagani, genetista del Wellcome Trust Sanger Institute y la Universidad de Cambridge, añadió que "el resultado más emocionante de nuestros hallazgos es que el estudio levanta el velo que había ocultado un eslabón en la historia de todos los euroasiáticos, mejorando la comprensión de miles de millones de personas sobre su historia evolutiva". Añadió que es "emocionante que el ADN de las personas vivas, en nuestra era genómica, nos permita explorar y comprender eventos antiguos de hasta 60.000 años".
Para llevar a cabo su investigación, los científicos analizaron los genomas completos de 225 personas de las actuales Egipto y Etiopía. Estudios anteriores habían demostrado que las poblaciones modernas de estos países contienen genes que fluyeron desde el oeste de Asia, por lo que los investigadores bloquearon estas contribuciones euroasiáticas recientes en los genomas. Los científicos encontraron que las regiones genómicas restantes de las muestras egipcias eran más similares a las poblaciones que vivían fuera de África que las regiones restantes en las muestras etíopes.
Los investigadores también estimaron que las poblaciones europeas y asiáticas se separaron de los genomas egipcios hace unos 55.000 años, mientras que compartieron un último ancestro común con las poblaciones etíopes hace 65.000 años. Esto indica que Egipto fue, muy probablemente, la puerta a través de la cual el Homo sapiens se extendió desde África a todo el mundo.
Preguntas aún por responder
El Dr. Chris Tyler-Smith, otro de los autores del estudio en el Wellcome Trust Sanger Institute, señaló: "Este importante estudio todavía deja preguntas por responder, por ejemplo, ¿ocurrieron otras migraciones también desde África al mismo tiempo, pero no dejaron ningún rastro en los genomas actuales?". Añadió que "para responder a esto, necesitamos genomas antiguos de poblaciones a lo largo de las rutas potenciales, y de manera similar, al añadir genomas actuales de Oceanía, podríamos descubrir si hubo una migración separada, quizás del sur, hacia estas regiones o no".
Smith concluyó que "nuestro enfoque demuestra cómo se pueden utilizar los datos y las herramientas genómicas más recientes para responder a estas fascinantes preguntas sobre nuestros orígenes y migraciones humanas".
Fuente: Daily Mail